Jesuitas reiteran apoyo a dreamers

Autor
Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús

Fecha

06 de septiembre, 2017

La Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús lamenta la decisión de la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de terminar la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), debido a que va en contra de los derechos humanos de los migrantes, uno de los sectores más vulnerables por el racismo, la pobreza y la violencia que sufren continuamente.

Al igual que la Conferencia Jesuita de Estados Unidos y Canadá, reiteramos nuestro apoyo a los Dreamers (soñadores) y les recordamos que no están solos. Los jesuitas, así como miles de colaboradores laicos, no nos daremos por vencidos en la lucha por sus derechos.

"Ustedes vinieron a nosotros por una educación, pero también por una guía pastoral y espiritual, y les damos la bienvenida –no por su nacionalidad- pero porque ustedes son nuestras hermanas y hermanos en Cristo. Ningún gobierno puede romper ese enlace sagrado", señala una Carta Pastoral publicada este martes por la Conferencia binacional.

Cabe recordar que desde el inicio de la administración Trump, los jesuitas en ambos lados de la fronterahemos levantado la voz en apoyo a los Dreamers.

Desde diciembre pasado, universidades y colegios jesuitas en Estados Unidos, informaron que protegerían a sus estudiantes indocumentados al reafirmar su compromiso por custodiar la dignidad de cada persona, de trabajar por el bien común de su nación, así como promover una fe viva que trabaja por la justicia.

En febrero de este mismo año, la Asociación de Universidades confiadas a la Compañía de Jesús en América Latina (AUSJAL) y el Sistema Universitario Jesuita de México (SUJ), se comprometieron a asesorar y orientar académica y jurídicamente a los estudiantes que sean deportados o retornen debido a su estatus migratorio.

Vea: AUSJAL Y SUJ comprometen apoyo a dreamers

Los jesuitas de México también nos unimos al llamado hecho por nuestros hermanos en Estados Unidos y Canadá, para que el congreso estadounidense actúe sin retraso en la promulgación de una solución duradera y, hoy más que nunca, nos comprometemos con la Ley de Dios, de amar a los extranjeros.

A continuación la traducción de la carta firmada por Timothy Keisick, SJ, Presidente de la Conferencia Jesuita de Estados Unidos y Canadá:

Carta Pastoral de los jesuitas luego de que la administración Trump decidió terminar la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés)

Queridos Dreamers (soñadores)

Les escribimos en este día tan difícil para recordarles del amor que Dios les tiene y para decirles que nos están solos. A lo largo y ancho de Estados Unidos, los Dreamers (soñadores) como ustedes han enriquecido los salones de las escuelas jesuitas –desde los más pequeños entre ustedes hasta los que están estudiando grados académicos avanzados. Ustedes vinieron a nosotros por una educación, pero también por una guía pastoral y espiritual, y les damos la bienvenida –no por su nacionalidad- sino porque ustedes son nuestras hermanas y hermanos en Cristo. Ningún gobierno puede romper ese enlace sagrado.

Mientras que ustedes, cuyo número de calcula en 750.000 son llamados "Dreamers", ustedes nos han ayudado a soñar también. Por su ejemplo, jesuitas y miles de educadores laicos en nuestros colegios en todo EE.UU., hemos soñado con nuevas posibilidades para personas jóvenes como ustedes que, en muchos casos, han escapado de la violencia, pobreza y desesperación.

Hacemos un llamado al Congreso para que actúe sin retraso en la promulgación de una solución duradera pero, hoy más que nunca, nos comprometemos con la Ley de Dios que nos llama a amar al extranjero, recordando que nuestros ancestros en la fe alguna vez fueron extranjeros en otras tierras.

Estados Unidos es un gran país porque es una tierra de oportunidad, valores familiares y comprensión. A lo largo de nuestra historia hemos dado a los recién llegados la oportunidad de trabajar duro y ser exitosos, con gran beneficio para nuestro país. También consideramos de gran importancia la unidad familiar. Los jesuitas, junto con obispos, educadores laicos y otros miles, hemos levantado nuestras voces para apoyar una amplia reforma migratoria, incluyendo la protección a DACA y a los Dreamers, y no nos daremos por vencidos. Juntos reconocemos y buscamos honrar su dignidad. Hoy, y en las siguientes semanas y meses difíciles, seguiremos esforzándonos para alcanzar una plena realización de sus derechos.

Por favor, sepan que están en nuestras oraciones y que seguimos compartiendo sus sueños.

En Cristo,

P. Timothy Keisick, SJ