El académico investigador de la Universidad Iberoamericana León, Dr. Fabrizio Lorusso, integrante de la Plataforma por la Paz y la Justicia en Guanajuato, se pronunció durante la disculpa pública que la Secretaría de la Defensa Nacional (DEFENSA, antes SEDENA) emitió el sábado 18 de enero en la Alhóndiga de Granaditas (Guanajuato, Gto.) por la desaparición forzada de José Salvador Cárdenas Fuentes.
En representación de las víctimas, el académico precisó que la disculpa es un primer paso logrado gracias a un amparo y a la lucha de la familia del joven, quien, el 17 de marzo de 2017, a la edad de 19 años, fue ejecutado extrajudicialmente por militares en el predio La Aguacatera (Irapuato).
La disculpa fue emitida por Vicente Pérez López, comandante interino de la Decimosegunda Zona Militar; y Marco Antonio Ramírez Tenorio, comandante del 8vo Regimiento Blindado de Reconocimiento, derivada de la sentencia de reparación del daño dictada en noviembre de 2024 por la jueza Karla Macías del Juzgado Noveno de Distrito en el Estado de Guanajuato.
Ambos reconocieron públicamente la responsabilidad del personal militar por la violación de los derechos humanos de José Salvador y los graves daños que causaron a su madre y a su familia.
De acuerdo con un comunicado distribuido por la Plataforma por la Paz y la Justicia en Guanajuato, José Salvador y su primo Andrés fueron detenidos por los militares cuando se dirigían en una motocicleta rumbo a la comunidad La Caldera. En su testimonio, Andrés afirma que los militares iban persiguiendo a otros dos jóvenes cuando se pararon a interrogarlos y, posteriormente, golpearon con una tabla a José Salvador.
Andrés logró huir. Horas después, cuando regresó acompañado por otro primo y dos amigos a donde vio por última vez a José Salvador, ya no había nadie. Dos días después, la madre del joven acudió a promover una demanda de amparo a su favor la cual resultó procedente; es decir, se le reconoció el carácter de quejosa desde la admisión de la demanda.
El 24 de marzo, José Salvador fue localizado sin vida. Su cuerpo fue hallado a un costado de la carretera federal 45 Salamanca-Irapuato con una herida producida por un proyectil disparado por arma de fuego que penetró el cráneo.
“La reparación es un proceso largo, apenas comienza con el reconocimiento público de un abuso de la autoridad, de una grave violación a los derechos humanos en contra de José Salvador, y que continúa con el reconocimiento de su honradez y alegría, con la restitución de su historia y de su nombre, de sus actos dadivosos y de sus proyectos truncados, que merecen memoria, respeto y justicia”, agregó Lorusso en su discurso.
En el acto realizado el pasado fin de semana se pronunció también el Dr. Raymundo Sandoval, integrante de la Plataforma y profesor de asignatura de esta Casa de Estudios. Manifestó que, con la disculpa pública, el Estado Mexicano no solo reconoce su responsabilidad legal frente a un proceso judicial, sino que reconoce y se compromete a que los hechos cometidos no se repitan.
Agregó: “¿Qué hacer para que hechos como estos no vuelvan a suceder sargento, comandante? Que no haya detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales cometidas por agentes del Estado, como en el caso de José, por militares. Que este evento sirva para que las víctimas indirectas de desaparición no desistan en su búsqueda, porque como ellas mismas dicen: No descansaremos hasta encontrarles”.
“Mucho se aprende de la cercanía con las personas”.
El acompañamiento integral a las víctimas directas e indirectas, en el caso de desaparición y desaparición forzada, es una labor interdisciplinaria compleja y delicada, aseguró el doctor Fabrizio en entrevista realizada posterior al acto del sábado 18.
Mucho se aprende de ese acompañamiento en el campo y en la cercanía con las personas. Se crea previamente la confianza y se les apoya en diversos tipos de procesos: políticos, jurídicos, psicosociales y de memoria. “Es una tarea compleja, pero también muy satisfactoria que poco a poco la academia en México ha ido desarrollando y no solo las organizaciones no gubernamentales. La academia puede y debe hacerlo”.
Las organizaciones no gubernamentales y la academia tienen recursos humanos y materiales, e investigación, que deben ser puestos al servicio de las más apremiantes necesidades sociales, aseguró el académico.
A ocho años de la ejecución extrajudicial de José Salvador Cárdenas Fuentes, si bien la reparación integral prevé la disculpa del Estado, ahora se debe avanzar en la causa penal, explicó el doctor Lorusso. Esto implica impulsar a la Fiscalía General de la República a que dé con los culpables; se sabe que son de la SEDENA, pero no se conoce quiénes fueron los perpretadores.
Entre los diferentes procesos de reparación, se debe considerar el derecho de José Salvador a la memoria; en esto podrá participar la Ibero León a través del Archivo de la memoria sobre desapariciones en Guanajuato para incluir el expediente del joven irapuatense, entrevistas que se realizarán, los resúmenes del caso y la propia vida de José Savador para que no sea criminalizado.
El acompañamiento a las víctimas no implica simplemente observar, sino que se debe colaborar e incidir, señala el académico. Lo importancia de acompañarles debe ser a nivel personal, familiar, comunitario, social e institucional.
