Nuestra Ibero León llevó a cabo la presentación del cortometraje documental ‘El lugar de la memoria: Retorno a Salvatierra’, pieza audiovisual que muestra las vivencias de las familias de personas desaparecidas en su labor de búsqueda y su anhelo de convertir en un sitio de memoria y dignidad el predio donde en 2020 hallaron los restos de ochenta personas.
La presentación se realizó ante mujeres buscadoras de distintos colectivos, medios de comunicación, estudiantes e integrantes de nuestra comunidad académica y administrativa. La encabezaron el Mtro. Luis Alfonso González Valencia SJ, rector de nuestra Ibero; el realizador del corto, el Lic. José Eduardo González Ibarra, coordinador de Producción en Medios; el Dr. Fabrizio Lorusso, académico e investigador; y Angélica Almanza, vocera del colectivo Ángeles de Pie por Ti.
“Es un instrumento para hacer consciencia”, manifestó González Ibarra en relación a la utilidad del material exhibido. “Este corto de una producción muy sobria –diría que casi humilde– de ejecución sencilla, encontró un paisaje de dolor, pero también un paisaje de enorme fuerza, dignidad y de gran esperanza (…) Estas voces son un puñado de testimonios que representan a cientos y miles de voces en el país”.
‘El lugar de la memoria’ no sólo muestra las vivencias sobre la desaparición que compartieron las buscadoras y los buscadores al abrir su casa y su corazón, expuso el doctor Fabrizio, “también se basa en quiénes son las personas que todos y todas debemos buscar por ley, por ética y por solidaridad, qué se extraña de ellas y de ellos y también el propio colectivo y la lucha por este sitio de memoria”.
Queda de manifiesto lo que representa el sitio y lo que significa transformarlo del exterminio y del dolor a la unión y la memoria; “transformar la tierra que ahí está en otra cosa, algo mejor: La paz, la dignidad”.
La vocera de Ángeles de Pie por Ti expresó que es necesaria la justicia para que dejen de ocurrir las desapariciones. “Necesitamos encontrar la raíz del problema para que no se normalicen, para que las masacres no se olviden. Es algo que está marcando la historia y a las familias”. El hecho de que las desapariciones sigan ocurriendo no las deja vivir en paz. Tener un familiar desaparecido las somete al miedo y la angustia.
Finalmente, el padre rector compartió que con el cortometraje y su realización, nuestra Ibero se une a las personas buscadoras para que haya memoria, en el ánimo de que terminen las condiciones de violencia en que vivimos. Agregó: “El documental abona en el sentido de transformar un sitio en donde fueron encontradas varias personas, en un símbolo de apostar por la justicia, la esperanza y por un mundo de fraternidad”.
